Juliana Manco es mucho más que una experta en marketing: es una profesional apasionada por la agroindustria y la sostenibilidad, con una visión que le permite comprender el complejo y dinámico panorama global de la fruticultura. Ingeniera agrónoma de la prestigiosa ESALQ, Universidad de São Paulo, con un posgrado en marketing, Juliana se vinculó con el campo desde pequeña. Largas temporadas en la hacienda citrícola de sus tíos le impregnaron este amor por la tierra, llevándola a optar más tarde por una carrera relacionada con el agro y la producción de alimentos.
Recién egresada de la facultad, su primer empleo fue precisamente en AgroFresh, en 2003, pero no en marketing. En la empresa estadounidense se sumergió en el mundo de la investigación y el desarrollo (I+D), experiencia que le permitió profundizar sus conocimientos en tecnologías de postcosecha, un área que la había cautivado en su última etapa universitaria. Luego de pasos por grandes compañías como Monsanto y Valagro (hoy Syngenta Biologicals), en 2015 Juliana regresó a AgroFresh, atraída por el compromiso de la empresa con la innovación tecnológica, la sostenibilidad, y el liderzgo alcanzado en preservación de la frescura y calidad de los productos agrícolas.
Con casi diez años en AgroFresh, Juliana ha jugado un papel esencial en consolidar la presencia de la empresa en mercados clave de Latinoamérica, como Argentina, Brasil y Chile, llevando soluciones de alto impacto a los productores de la región, entre las que destacan SmartFresh, Control-Tec y Harvista. Estas tecnologías son un ejemplo de cómo el enfoque estratégico de la empresa se alinea no solo con la competitividad de los productores, sino que también con las tendencias globales de sostenibilidad y reducción del desperdicio alimentario.
Pero más allá de la innovación tecnológica, lo que realmente distingue a Juliana es su profunda comprensión de la globalización de la industria frutícola, y su capacidad para analizar cómo las dinámicas del mercado mundial están cambiando, impulsadas por la evolución de los consumidores, los avances en la ciencia de alimentos y las crecientes demandas ambientales. En un contexto de incertidumbre y grandes transformaciones, la ejecutiva plantea que la generación de alianzas estratégicas es el camino para enfrentar desafíos globales como el cambio climático y la seguridad alimentaria. “AgroFresh está comprometido en ser un socio clave en este esfuerzo”, subraya.
De acuerdo a tu experiencia en el sector, ¿qué tendencias dominarán la industria mundial de frutas en los próximos años?
Las tendencias para los próximos años incluyen una creciente demanda por sostenibilidad, trazabilidad y reducción de desperdicios. Además, la digitalización y el uso de tecnologías como la inteligencia artificial (IA) y soluciones predictivas desempeñarán un papel crucial en la optimización de procesos y toma de decisiones.
La preocupación por la salud y alimentación saludable seguirá creciendo entre los consumidores, y eso será clave para el impulsar el consumo de frutas como paltas y arándanos. De nuestra parte, tenemos que comunicarnos con los consumidores y seguir incentivando la demanda, ya sea con campañas, como en el caso de las paltas, pero también con innovación, lanzando al mercado productos de alto impacto.
¿Cómo ves el impacto qué está teniendo la IA en la industria hortofrutícola?
Desde el campo, la IA tiene aplicaciones muy vastas y van desde la agricultura de precisión y el monitoreo de cultivos con drones, hasta el análisis predictivo de tendencias climáticas y del mercado.
La inteligencia artificial está transformando rápidamente la industria hortofrutícola al optimizar procesos clave en toda la cadena de valor. En el manejo de la calidad, analiza factores como color, tamaño y textura para clasificar frutas, asegurando estándares consistentes y minimizando el desperdicio; proporciona análisis predictivos y recomendaciones en tiempo real, ayudando a los actores de la cadena a tomar decisiones informadas sobre manejo de cultivos y recursos, mejorando los resultados operativos.
Con FreshCloud Inspection eso ya está siendo una realidad, nuestro software en nube permite optimizar procesos, análisis de calidad, manejo de inventario, permitiendo la toma de decisiones en tiempo real.
En términos de trazabilidad, la IA, junto con tecnologías como blockchain, permite un seguimiento detallado de los productos desde el campo hasta el consumidor, fortaleciendo la confianza y garantizando la autenticidad y la seguridad alimentaria.
La IA revolucionará áreas como la predicción de demanda, manejo de inventarios y monitoreo de calidad. También facilitará la optimización en la logística, desde el campo hasta el consumidor final, mejorando la eficiencia en toda la cadena de valor. Sin embargo, por ser una tecnología nueva y “en formación”, enfrenta desafíos como posibles sesgos en los algoritmos y la necesidad de un monitoreo continuo.
La IA revolucionará áreas como la predicción de demanda, manejo de inventarios y monitoreo de calidad.
¿Cómo proyectas el escenario frutícola en América Latina para las próximas décadas?
América Latina seguirá creciendo como productor y exportador global gracias a su diversidad de climas y cultivos, además por la diversificación de mercados de destino y productos. Según la FAO, se espera que en los próximos 10 años la región sea responsable por el 24% de las exportaciones globales de frutas, destacando el rápido crecimiento de países como Perú en frutas frescas. Brasil es el tercer productor mundial de frutas, con un mercado interno importante; México tiene su mercado en el vecino Estados Unidos; Chile, por su parte, es un exportador consolidado e innovador, que ha sabido adaptarse a los nuevos escenarios y hoy se destaca con la cereza. Y vemos nuevos players, como Colombia, surgiendo ya como tercer exportador global de paltas.
El foco de América Latina estará en los productos que tienen una demanda creciente, como cerezas, aguacate, arándanos, uvas de mesa y frutos tropicales.
Los tratados comerciales y un consumidor que busca alimentos más saludables, son dos factores favorables para nuestra región, que impulsarán su crecimiento. Sin embargo, el mercado enfrenta desafíos como la fragmentación del comercio internacional, restricciones logísticas por conflictos y fenómenos climáticos, y el aumento de costos de transporte, lo que pone en riesgo la competitividad. Así, cuanto más diversificados estemos en mercados -incluyendo mercados interregionales- y en productos ofertados, más probabilidades tendremos de mitigar el riesgo.
Otro desafío importante para la industria es lograr la fidelización del consumidor, para lo cual existen dos requisitos fundamentales: mantener una calidad de fruta consistente en el tiempo, y garantizar la disponibilidad a lo largo del año en aquellas frutas que sea posible. Como AgroFresh, a través de nuestro equipo de especialistas, estamos comprometidos en poner a disposición herramientas a la medida de nuestros clientes para abordar con éxito estos objetivos.
Los acuerdos internacionales y un consumidor que busca alimentos más saludables, son dos factores favorables para nuestra región, que impulsarán su crecimiento.
¿Qué mercados ves con mayor potencial? ¿Dónde se debe buscar la diversificación?
Dentro de China aún veo mucho espacio para crecer. Es posible desarrollar los mercados del interior, ya que hoy la exportación está muy concentrada en la costa. Por otra parte, tenemos a India, con un poder de compra en expansión y que será un mercado relevante en el futuro. No obstante, aún existen desafíos logísticos que superar y que por ahora impiden un abordaje más agresivo de ese mercado. Asimismo, es necesario hacer un trabajo de promoción y desarrollo de mercado que permita generar la demanda, tal como lo hizo la palta en Estados Unidos.
UNA INDUSTRIA SOSTENIBLE
Desde que llegaste a AgroFresh en 2015, ¿cómo has visto la evolución de la empresa?
Desde mi llegada, AgroFresh ha evolucionado significativamente, por lanzamientos de nuevos productos como también integrando tecnologías de empresas como Tecnidex, Tessara y más recientemente Pace International, lo que ha ampliado nuestro portafolio y las posibilidades de apoyar nuevos mercados. He estado al frente de todos los lanzamientos de AgroFresh en la región desde entonces, y he apoyado el crecimiento de la compañía en nuevos mercados. Así pudimos posicionarnos en cerezas, paltas, cítricos, arándanos, melones, sandías y mangos, ofreciendo soluciones integradas que ayudan a la cadena de los productos frescos a expandir sus negocios con la calidad y sustentabilidad que los mercados exigen.
El enfoque en la sostenibilidad, la innovación y la transparencia se ha vuelto esencial para generar confianza en los mercados globales.
¿Cuál es el plus que ofrece AgroFresh para contribuir con la calidad y frescura de los productos?
En general, el mercado frutícola busca atender la demanda creciente del consumidor y fidelizarlo. Para eso, es necesario proveer calidad consistente y disponibilidad a lo largo del año. Ahí entra AgroFresh. Contamos con un equipo de especialistas, soluciones a la medida para nuestros clientes y un portafolio innovador, comenzando por nuestra solución SmartFresh, que ayuda a mantener la calidad de la fruta, como también a extender su vida útil. Junto con los recubrimientos, fungicidas y otras soluciones estamos apoyando a nuestros clientes a maximizar la calidad de sus productos frescos hasta llegar al consumidor, y también a reducir la pérdida y desperdicio de alimentos.
Nuestro enfoque integral combina tecnologías innovadoras, con servicios especializados y herramientas digitales como FreshCloud Inspection, que permite un monitoreo avanzado de la calidad, la interacción con la cadena y mayor visibilidad a lo largo de la misma.
El poder prolongar la vida útil de la fruta es un atributo clave para la industria. ¿Qué ofrece AgroFresh en esta línea?
Efectivamente, tenemos desafíos como tránsitos hasta destinos lejanos y escasez de mano de obra, que afectan la calidad de las frutas. Por ejemplo, en el campo, Harvista 1,3 SC es una herramienta orientada al control del manejo de la cosecha de manzanas y arándanos, permitiendo la gestión de la mano de obra. Otras soluciones destacadas son SmartFresh, que ya mencioné, y nuestras líneas Berrisys y Uvasys, que ayudan a prevenir el desarrollo de Botritis sp en uvas y arándanos, permitiendo a la fruta alcanzar los destinos más remotos.
En arándanos, ¿qué otros productos o innovaciones ofrecen?
Tenemos un portafolio con fungicidas y sistemas de aplicación distintos: Control-Tec Ultra Bajo Volumen, ideal para aplicar fungidas en línea sin dañar la piel sensible de los arándanos. También está la tecnología ActiMist (solo disponible en Chile por el momento), que permite aplicaciones de fungicida nebulizable (foggable) en cámaras y contenedores. Y no menos importante: Harvista, que mejora la firmeza, permite cosechas de frutos más grandes y, sobre todo, optimiza el manejo de la mano de obra. Harvista ya está disponible en Chile, Estados Unidos y prontamente en Perú.
¿Cómo aborda AgroFresh las diferencias o particularidades geográficas de los productores/exportadores?
Los desafíos varían según factores como el clima, las regulaciones locales e internacionales, y las exigencias de los mercados de destino. Por eso, adaptamos nuestras soluciones y brindamos soporte técnico personalizado en cada región. Además, nuestros productos siguen estándares de calidad y regulatorios internacionales.
Cuanto más diversificados estemos en mercados y en productos ofertados, más probabilidades tendremos de mitigar el riesgo.
¿Cuáles son las bases de la estrategia de AgroFresh en materia de sostenibilidad?
Nuestra estrategia se basa en reducir desperdicios, optimizar recursos como el agua y la energía, y desarrollar tecnologías que minimicen el impacto ambiental y maximicen la eficiencia y la rentabilidad.
Desde el punto de vista del manejo de la fruta, la escasez de agua es recurrente. Vemos la sequía en Piura (Perú), Chile, ahora México, y no solo en Latinoamérica: California es otro ejemplo. Y es súper importante tener presente lo siguiente: aunque el agua se asocia generalmente al riego, el uso de este recurso en la postcosecha es abundante, y es un tema del que no solo se habla poco, sino que se mide poco. Procesos de packing como hidrocooling, limpieza y lavado, utilizan mucha agua. Por esta razón, AgroFresh lleva liderando este tema desde hace mucho tiempo, enfocándonos en desarrollar soluciones que lo aborden de manera efectiva. Nuestra línea de equipamientos Control-Tec ayuda a reducir el consumo de agua en esas etapas, ya sea por la disminución de las necesidades de recambios o por el uso optimizado del agua en la limpieza y desinfección. En varios países -Argentina, Brasil, Chile, Perú, México- logramos reducir el consumo del agua de forma sustancial, en algunos casos hasta en 90%, en cerezas, cítricos, paltas, mangos, manzanas, peras y otros.
¿Qué desarrollos e innovaciones se vienen para el futuro próximo?
Seguiremos expandiendo soluciones digitales como FreshCloud, además de lanzar productos innovadores que respondan a las necesidades de los mercados y a las expectativas de sostenibilidad. Hace poco, anunciamos una nueva colaboración con la empresa australiana Rubens Technologies para agregar un sensor a nuestra plataforma FreshCloud, que evalúa la calidad de la fruta en campo por fotosensores e inteligencia artificial, sin necesidad de hacer un análisis destructivo. AgroFresh seguirá las inversiones en I+D, especialmente en Latinoamérica, donde tenemos el centro de innovación más moderno de la compañía ubicado en Rancagua, Chile, con laboratorios de última generación para apoyar a nuestros clientes y el desarrollo de nuevas tecnologías.
¿En qué ha cambiado el marketing de la industria en la última década?
El marketing en la agroindustria ha evolucionado significativamente en los últimos diez años, adoptando un enfoque más estratégico y basado en datos. La digitalización ha transformado la forma en que nos conectamos con los clientes, pero no remplazará el contacto personal, especialmente en nuestro mercado. Además, el enfoque en la sostenibilidad, la innovación y la transparencia se ha vuelto esencial para generar confianza en los mercados globales. Hoy en día, los consumidores y socios comerciales buscan soluciones que combinen eficiencia con un compromiso genuino hacia el medioambiente y las comunidades, lo que ha llevado al marketing a jugar un rol clave en la comunicación de esos valores.