A nivel mundial, Chile se ha consolidado como un actor importante en la industria de cerezas, posicionándose como el primer productor del hemisferio sur, además de ser el principal exportador de esta especie. Con una alta calidad y un sabor excepcional, la fruta chilena ha conquistado destinos lejanos, como Europa y Asia, logrando cumplir con las expectativas y requerimientos más exigentes de los distintos mercados. La última temporada de exportaciones de Chile (2022/23) anotó un récord histórico, con volúmenes que sobrepasaron las 415 mil toneladas, alzándose un 16% comparado con lo registrado la campaña anterior. Similar a las temporadas previas, China-Hong Kong se destacó por ser el destino de preferencia, absorbiendo alrededor del 88% de los envíos, seguido por Estados Unidos con el 4% y por Corea del Sur con el 2%, entre otros países.
Desde la demanda, China se presenta como el líder importador de cerezas a nivel mundial, seguido por Rusia, los países de la Unión Europea, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido, entre otras naciones, particularmente de Asia. A modo de ejemplo, y con base en la información de International Trade Center (ITC-TRADEMAP), durante el año 2022 China importó más de 366 mil toneladas de cerezas, siendo Chile el principal proveedor, representando el 98% de los volúmenes, seguido por Estados Unidos con el 1%, entre otros.
Si bien, el negocio de cerezas ha registrado cotizaciones favorables y ha sido rentable para los productores chilenos, durante los últimos años las condiciones macroeconómicas tras la reactivación post covid, sumado a la guerra, generaron un aumento en los costos de la cadena productiva, lo cual, en un escenario de oferta al alza, ha provocado que la curva de precios tienda a la baja.
A su vez, en China, la economía del país presenta signos de desaceleración, ocasionados por una débil inversión privada, menores exportaciones y un menor consumo en general, tras la política de cero covid. En detalle, para junio de 2023, la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de China puntuó -0,2%; la inflación acumulada del presente año ronda el 0,7%, mientras que de forma interanual esta cifra es de 0%. Diversas entidades advierten que el gigante asiático podría tener el riesgo de entrar a una etapa de deflación, dada por un consumo interno que no ha sido capaz de repuntar, por lo que, si esta tendencia continúa a mediano y largo plazo, se podrían afectar seriamente las cotizaciones para las futuras exportaciones chilenas.
La Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), al igual que en años previos, se mantiene en la constante búsqueda de fidelizar y atraer a más consumidores en China. No obstante, exportadores nacionales también incluyen la diversificación de mercados como una opción. Por ejemplo, los envíos hacia Estados Unidos crecieron en más de un 170% en las últimas dos campañas, desde las 6,6 mil toneladas en la temporada 2020/21 a más de 17,8 mil toneladas en el 2022/23. Por otra parte, algunos productores han señalado que el nuevo foco podría estar en innovar en las técnicas de producción e incentivar los recambios de las variedades con bajo rendimiento y con una menor vida post cosecha; intentando satisfacer a los consumidores, que cada vez serán más exigentes, además de buscar impulsar las rentabilidades.
ALTIBAJOS DE LA TEMPORADA 2022/23
En la campaña 2022/23, Chile se enfrentó a una primavera fría que generó retrasos en las primeras cosechas, con el tiempo en contra frente a un Año Nuevo Chino (ANC) temprano. Sin embargo, en diciembre, el verano se hizo sentir fuertemente, acelerando la madurez de la fruta y concentrando las cosechas en un corto periodo de tiempo.
En cuanto a China, el ANC del 2023 ocurrió una semana antes que la temporada previa, por lo que todo el esfuerzo nacional se concentró en adelantar las cosechas, a modo de poder llegar con fruta antes del 22 de enero. La coordinación de los productores, exportadores y gremios, en conjunto con los agentes de los mercados de China -destacándose la apertura 24/7 del mercado de Guangzhou- ayudaron a despejar los volúmenes, sin presentar mayores complicaciones.
Respecto a los envíos chilenos, el 83% de las exportaciones se originaron entre la Región de O’Higgins y la Región del Maule. Por variedad, Lapins (36% del volumen total), Santina (27%) y Regina (15%) fueron las preferidas, sumando más de 323 mil toneladas a nivel nacional, representando el 78% del total de la campaña.
Si bien, antaño las variedades Royal Dawn, Brooks y Glen Red fueron las dominantes en los primeros envíos de las temporadas, en las campañas 2021/22 y 2022/23 estas perdieron participación en comparación con Santina, que se ha transformado en la variedad preferida por los exportadores, dada su mejor vida post cosecha.
Se espera que tanto la producción local como la demanda internacional sigan en aumento. No obstante, la industria se deberá preparar para los posibles nuevos desafíos, como los riesgos asociados a las condiciones macroeconómicas, además de una posible sobreoferta, por lo que el marketing y la promoción jugarán un rol importante.
EXPECTATIVAS PARA UNA NUEVA CAMPAÑA
De cara al futuro, se espera que tanto la producción local como la demanda de cerezas internacional sigan en aumento. No obstante, la industria se deberá preparar para los posibles nuevos desafíos de la temporada, como los riesgos asociados a las condiciones macroeconómicas de los mercados, además de una posible sobreoferta, por lo que el marketing y la promoción jugarán un rol importante.
Respecto al gigante asiático, el Año Nuevo Chino 2024 iniciará el 10 de febrero, durante la semana 6, dos semanas después que en 2023. Esta fecha se muestra como un ligero alivio para la nueva temporada chilena, permitiendo mayor flexibilidad a la hora de los envíos. Algunos importadores de China señalan que aún existiría capacidad para recibir mayores volúmenes de cerezas en el corto plazo, sin embargo, es necesario velar por evitar un exceso en la acumulación de oferta antes de la celebración.
Algunos importadores chinos señalan que aún existiría capacidad para recibir mayores volúmenes de cerezas en el corto plazo, sin embargo, es necesario velar por evitar un exceso en la acumulación de oferta antes del ANC.
A pesar de que China se sitúa como uno de los principales importadores de cerezas a nivel mundial, es importante considerar que se estima que el país tiene un consumo per cápita cercano a 0,6/kg de cerezas. A modo comparativo, otros destinos presentarían un consumo más elevado, como la Unión Europea y Estados Unidos, que anotarían cifras cercanas a 1,6/kg y 0,98/kg de cerezas por persona, respectivamente, por lo que aparecerían como mercados atractivos con un potencial que aún no está del todo aprovechado.
Por otra parte, se ha observado un incremento importante en los envíos de cerezas chilenas hacia otras naciones asiáticas, como Corea del Sur, Taiwán y Vietnam. Se debe destacar la situación de India, país que se posicionaría como una de las economías de más rápido crecimiento en el mundo, siendo relativamente resiliente a las inclemencias macroeconómicas globales. Del mismo modo, la cantidad de habitantes ya habría superado a la de China, convirtiéndose en el país más poblado a nivel mundial.
Para la nueva temporada 2023/24, las proyecciones iniciales de Decofrut estiman que los envíos de cerezas de Chile aumenten al menos en un 13%, superando las 467 mil toneladas. Aplanar la curva de envíos y aprovechar los extremos de la temporada, sobre todo en la parte temprana, deberá ser una de las tareas de la industria nacional, todo de la mano de un recambio varietal. En cuanto a los productores y exportadores, estos se muestran optimistas, con un dólar casi 20% por debajo del año anterior y, con las tarifas de los fletes más normalizadas, se estima que tanto los costos productivos como los logísticos tiendan a la baja.
Si bien en las últimas campañas de Chile se ha observado una mejor calidad en los arribos y un aumento en las campañas de promoción, aún existe un gran margen para mejorar. La consistencia en los arribos, manteniendo la calidad y los calibres de gran tamaño, serán la clave para ganar los mercados, a la vez que el marketing permitirá acercarse a los nuevos consumidores.