El arándano ha sido sin duda una de las frutas más prometedoras durante los últimos años. La popularidad de esta especie viene asociada a sus propiedades, en donde destaca su alto contenido de antioxidantes, catalogándola como un súper alimento. La creciente preocupación por el consumo de alimentos saludables se ha visto acelerada debido al Covid-19, siendo el arándano uno de los posibles ganadores dentro de este grupo.
La acotada oferta de años atrás y la alta demanda en países como Estados Unidos y Canadá fomentaron el desarrollo de variedades precoces, de menor requerimiento de frío y de mayor potencial productivo, lo que llevó a que plantaciones en el hemisferio sur cubrieran las necesidades del mercado. Hace poco más de 10 años, el arándano estaba destinado solo a regiones templadas, sin embargo, el recambio varietal desencadenó un aumento apresurado de plantaciones en zonas cálidas de Estados Unidos, México, la zona centro-norte de Chile y por supuesto, Perú.
Los países del hemisferio sur han sido los de mayor crecimiento en las exportaciones de arándanos a nivel global, siendo Perú y Chile los dos principales exportadores. Según datos de SENASA, Perú creció a más de 120 mil toneladas para el 2019/20 posicionándose como el principal exportador del mundo. Chile, que posee una mayor tradición en la producción de esta especie, según datos de Expordata-ASOEX, exportó más 109 mil toneladas la última temporada. Sudáfrica logró enviar cerca de 12 mil toneladas durante la última temporada (+695%), mientras que México lo hizo con volúmenes de 45 mil toneladas (+377%).
Por otra parte, Argentina y Uruguay han perdido relevancia, con 14 mil toneladas (-41%) y cerca de mil toneladas (-55%), respectivamente. En total, los principales exportadores del hemisferio sur enviaron cerca de 258 mil toneladas durante la última temporada (+106% en comparación al 2014/15), de las cuales Perú aportó el 47%, Chile el 42%, Argentina el 6% y Sudáfrica el 5% del volumen final.
La actual temporada (2020/21) se encuentra en pleno desarrollo en la mayoría de los países exportadores del hemisferio sur, proyectándose un incremento en los volúmenes de los principales actores. Perú cuenta con una temporada avanzada y estima alcanzar las 170 mil toneladas al final de ésta (+42% que la última temporada); mientras que Chile prevé un volumen similar a lo realizado años previos, con valores cercanos a las 111 mil toneladas de arándanos frescos (+2%). Sudáfrica también presentará un mayor volumen con 17 mil toneladas, logrando una cifra récord, pero problemas de logística debido a la pandemia han dificultado y encarecido sus envíos aéreos. En contraste, Argentina espera tener una campaña discreta enfocándose en la calidad, el envío de orgánicos y en aumentar la tasa de transportes marítimo.
Mayores volúmenes disponibles acarrean desafíos en la industria
El aumento sostenido en los volúmenes, así como la extensión de las temporadas gracias a las nuevas variedades, han provocado que la disponibilidad del arándano cambie de un régimen estacional a anual, eliminando prácticamente las ventanas de comercialización, de la que la producción de contra estación se veía beneficiada.
Actualmente el principal mercado para los arándanos es Estados Unidos. Las tasas de consumo en el país han crecido de manera acelerada, sin embargo, la demanda se ha visto superada de manera crítica durante algunos periodos del año. Esto ha traído mayores exigencias por parte de los consumidores, desafiando a los productores y exportadores a producir con mayor eficiencia, pero los altos costos de producción, las labores de transporte y logística, han dificultado a la industria.
Para este mercado los dos principales exportadores de arándanos son Perú y Chile. Ambos aportaron casi la totalidad de los envíos del hemisferio sur durante la temporada 2019/20, con 67 mil toneladas (50%) y 57 mil toneladas (43%), respectivamente. Sin embargo, la oferta de Perú, ha crecido de manera estrepitosa en las últimas temporadas a diferencia de Chile, que en los últimos años ha disminuido su presencia en búsqueda de nuevos países de destino.
El principal país exportador posee una temporada más temprana que sus competidores de hemisferio, lo que le ha traído beneficios y le ha permitido expandir su producción, pero esto podría cambiar a corto plazo. Como consecuencia del aumento de arribos peruanos, EE.UU. ha solicitado a la Comisión de Comercio Internacional, iniciar una “Investigación de Salvaguardia Global” de cómo las importaciones de arándanos estarían afectando a los productores locales, especialmente de la zona sureste del país, lo que podría traducirse en cuotas, aranceles o impuestos sobre los arándanos importados. A pesar de que la investigación está centrada por ahora en Perú, esto podría afectar a otros países exportadores como Chile, México, Argentina y Canadá, lo que podría mermar el interés de los países exportadores.
En el caso de Chile las autoridades se mantienen alerta y trabajando en la estrategia para mejorar el posicionamiento del arándano chileno. Si bien los envíos disminuyeron en un 11% entre las dos últimas temporadas, EE.UU. sigue siendo el principal destino, sobre todo para los envíos de arándanos orgánicos, los que concentraron cerca del 74% de su volumen a este mercado. Sin embargo, este año la campaña podría ser distinta, dado que Chile obtuvo el “System Approach” para sus zonas productivas de las regiones del Ñuble y el Biobío, la que traerá beneficios para las producciones tanto orgánicas como convencionales.
Las exportaciones desde el hemisferio sur hacia EE.UU. han aumentado un 65% en las últimas seis temporadas, totalizando más de 134 mil toneladas para esta última, lo que hizo caer los precios en promedio un 24% en dicho periodo. Las proyecciones para las próximas temporadas en EE.UU. son aún inciertas, sin embargo, se prevé que los volúmenes productivos locales se vean limitados debido a los altos costos de producción en algunas regiones y que las importaciones debiesen presentar una menor tasa de crecimiento que años anteriores debido a qué Perú y México han comenzado a desacelerar sus nuevas plantaciones, mientras que Chile ya se encuentra en una etapa de madurez del negocio.
Situación similar ha presentado el mercado europeo. Los crecientes volúmenes exportados por Perú, Chile y Sudáfrica al viejo continente, provocaron una contracción en las cotizaciones durante las últimas campañas. Perú sigue como el principal oferente, logrando exportar más de 38 mil toneladas durante el 2019/20 (+12 mil toneladas que la campaña previa), mientras que Chile lo hizo con cerca de 35 mil toneladas (+3 mil toneladas). En total, el mercado recibió más de 90 mil toneladas provenientes de países productores del hemisferio sur, lo que registra un incremento en los volúmenes exportados cercanos al 177% en las últimas seis campañas, con una contracción promedio en los precios de venta de un 22% entre esos años.
Por su lado, el mercado chino ha registrado una tendencia a la baja de precios durante el transcurso de las últimas temporadas y de especial manera la última, en la que debió enfrentar los problemas de confinamiento, cierre de mercados y mayor sensibilidad a la oferta producto del Covid-19. Para igual periodo, los envíos del hemisferio sur han aumentado un 203% su volumen, lo que ha incitado una baja en los precios de casi un 55%.
A modo de ejemplo, Chile exportó más de 16 mil toneladas la última temporada, abarcando el 51% de los envíos del hemisferio sur, mientras que Perú lo hizo en 14 mil toneladas (46%). No obstante, en lo que va de la nueva campaña, mejores precios se han comenzado a mostrar en China debido a la recuperación económica que registra, en conjunto a la mayor preferencia de los consumidores por alimentos nutraceúticos, lo que podría decaer a medida que aumenten los volúmenes de arribo.
Adicionalmente, la entrada de otros países productores como Colombia y de otras latitudes de África, han comenzado a ganar importancia, por lo que nuevos competidores podrían sumarse a la oferta ya existente, como es el caso de Zambia en China, que formalizó su apertura comercial este año.
El contexto político en la investigación de los arándanos importados por EE.UU.
La solicitud recientemente levantada a la Comisión de Comercio Internacional a los arándanos importados por EE.UU., viene directamente desde la administración del presidente Donald Trump, el que se enfrenta a un proceso electoral el próximo mes de noviembre. Esta investigación busca aclarar si el incremento de las exportaciones ha perjudicado a los productores locales de arándanos durante los últimos años, especialmente de los estados de Florida, Michigan y Georgia, los que serían clave de cara a las elecciones para el actual mandatario.
En caso de resultar positiva la supuesta afección hacia los productores locales, el presidente tendría la potestad de levantar tarifas arancelarias, impuestos o limitaciones a las importaciones de arándanos de carácter no especifico, lo que podría afectar las exportaciones de países como Perú, México, Chile y otros, en pro de salvaguardar la industria local y a las familias norteamericanas ligadas al negocio. Pese a lo anterior, la resolución de la investigación y sus posibles consecuencias podrían ver la luz después de los comicios, por lo que aún el panorama es incierto.
Por este motivo, tanto Perú como Chile comienzan a mirar con detención las directrices de la autoridad estadounidense, ya que ambos países son los principales exportadores del hemisferio sur. Las autoridades peruanas comienzan a preparar su defensa para aclarar que no han incurrido en prácticas no-competitivas y que su oferta sería clave para el retail, mientras que Chile estaría optando por diversificar sus exportaciones y fortalecer su industria de arándanos orgánicos hacia EE.UU. No obstante, cualquier imposición de parte desde EE.UU. planteará mayores desafíos en la exportación de ambos países, los que buscarán otros mercados de destino.
Diversificación de mercados, nuevas variedades y calidad son los pilares para el futuro
El aumento que se prevé en las próximas temporadas en conjunto con las posibles imposiciones resultantes de la investigación por parte de EE.UU., presionará a que Perú y Chile diversifiquen sus mercados.
La calidad y condición de arribo se han vuelto uno de los factores de mayor importancia en cuanto a los retornos obtenidos en los diferentes mercados de destino. Perú, al contar con una industria en crecimiento, posee una mayor diversidad de variedades, y en su mayoría, con buenas características, lo que ha fortalecido su industria. Situación contraria exhibe Chile debido a la mayor data que presentan sus plantaciones, en las que se han detectado variedades productivas como no aptas o con limitantes para la exportación debido a la dificultad que presentan tanto en calidad (bloom, color y sabor) como en condición (firmeza), lo que comienza a presionar a la industria chilena.
Es imperante para los países productores de arándanos obtener un excelente material genético que propicie fruta de alta calidad y de buena condición de viaje.
En respuesta, el Comité de Arándanos de Chile ha comenzado a levantar directrices para mantener un mercado consistente en calidad para las exportaciones de arándanos frescos. El primer pilar apunta al recambio varietal debido a que las plantaciones de mayor data de Chile comienzan a presentar limitaciones y dificultades en su calidad o condición de arribo, por lo que se recomienda optar por variedades modernas y de mejor viaje. De igual manera, se están generando manejos de pre cosecha, cosecha o pos cosecha para disminuir los problemas detectados, con miras a generar una “Norma de Calidad” que se ajuste a los requerimientos de los diversos mercados.
A medida que la disponibilidad de arándanos a nivel global siga aumentando, mayores dificultades y desafíos se irán presentando para la industria, a la vez que se perciben menores precios. Las ventanas comerciales de altos retornos, especialmente en el mercado estadounidense son cada vez más acotadas, lo que ha comenzado a empujar a productores como Perú o Chile a buscar y diversificar sus mercados, más ahora que el país norteamericano comienza a proteger sus producciones locales. Adicionalmente, los altos estándares de calidad y condición serán elementos claves para diferenciarse y lograr mejores retornos en mercados como el asiático y europeo. Por lo tanto, es imperante para los países productores de arándanos obtener un excelente material genético que propicie fruta de alta calidad y de buena condición de viaje, en pro de diferenciarse entre los diversos orígenes. De igual manera serán relevantes las campañas público/privadas para mantener, fidelizar y atraer nuevos consumidores, lo que presupone un gran desafío y oportunidad para los principales productores del hemisferio sur como Perú y Chile.